Bitácora del Gobierno, parte VI: Adorni sigue sumando gente, ¿El ajuste del Gobierno donde esta?

Mientras el gobierno justifica despidos masivos en el Estado bajo la consigna de un "ajuste necesario", Manuel Adorni sigue incrementando su equipo en la Secretaría de Comunicación y Medios. Con más de 100 nombramientos, incluyendo a su propio hermano, el discurso del recorte parece cada vez más lejano.

POLITICA NACIONAL

Por Camila Dominguez

10/29/20242 min read

El gobierno de Javier Milei insiste en una agenda de "ajuste" en el sector público, prometiendo recortes de personal y declarando que el país necesita una administración más austera y eficiente. Sin embargo, mientras organismos públicos se cierran y se despiden empleados, el vocero presidencial, Manuel Adorni, sigue incrementando el número de funcionarios bajo su mando. Con la designación de Federico Esteban Sicilia como nuevo Subsecretario de Coordinación Administrativa en la Secretaría de Comunicación y Medios, Adorni suma ya más de 106 empleados en su área en solo 11 meses de gestión.

El contraste entre el discurso y las acciones es evidente. Este gobierno, que eliminó los cargos hereditarios en la administración pública en aras de reducir "privilegios de sangre", sigue nombrando funcionarios a dedo y mantiene en sus filas a familiares de altos cargos. A principios de año, Adorni sumó a su propio hermano a la nómina, algo que resulta cuando menos paradójico en un contexto donde se suprimieron estas prácticas bajo la bandera de la "transparencia y el mérito". Y no solo es una contradicción; el área de comunicación a cargo de Adorni se ha convertido en un gasto millonario para el Estado, con un costo mensual aproximado de 300 millones de pesos, o 3.600 millones al año.

El caso más reciente, el de Federico Sicilia, se suma a otros nombramientos de altos sueldos, como el de Walter Emmanuel Weimann, que, con su rol de Coordinador Presidencial de Medios Provinciales, percibe un sueldo de alrededor de 2 millones de pesos. Sin embargo, el propio Adorni pasó recientemente a tener "rango y jerarquía de ministro", un cargo por el cual recibirá unos 5 millones de pesos mensuales, equivalentes a 22 jubilaciones mínimas.

La contradicción no es menor. Mientras Adorni y su equipo insisten en que estos nombramientos son necesarios para asegurar una comunicación "eficaz" desde el gobierno, las políticas de despidos y ajuste continúan afectando a empleados de otros sectores del Estado. Además, la expansión de su área genera dudas sobre el verdadero interés en reducir el gasto público. ¿Es realmente una administración más eficiente o simplemente otra demostración de poder y favoritismo en una estructura estatal que pretendían reducir?

La imagen de un gobierno comprometido con el ajuste se desdibuja al ver que el sector público no deja de engordar cuando se trata de funcionarios aliados. Y mientras se cierran organismos bajo el argumento de reducir el "exceso de personal", en otras oficinas los cargos y los salarios continúan sumando cifras millonarias a la cuenta que paga el Estado.