Caputo y su teoría del “adelanto de precios”: el tren va a 200 km/h directo contra la pared
Luis Caputo vuelve a desafiar la realidad con una insólita declaración: "El dólar no está atrasado, los precios están adelantados". Mientras los salarios se pulverizan y el consumo se desploma, el Gobierno insiste en negar lo evidente. Con el Banco Central quemando 100 millones de dólares por día para contener el dólar financiero y el FMI observando en silencio, el choque contra la pared parece inevitable. ¿Cuánto más podrá sostenerse esta ficción económica?
POLITICA NACIONAL
Por Armando Ramirez
2/6/20252 min read


El ministro de Economía, Luis Caputo, lo hizo de nuevo. En un intento de justificar la política económica del gobierno de Javier Milei, dejó una de esas frases que parecen sacadas de un manual de autoayuda financiera: “El dólar no está atrasado, los precios están adelantados”. Una afirmación que no solo desafía la lógica económica, sino que también expone la gravedad de la situación: el impacto contra la pared parece inevitable.
Mientras el Gobierno insiste en que la inflación está en baja y que la economía se está acomodando, la realidad muestra otra cosa. Los salarios no alcanzan, la clase media se funde y el consumo cae en picada. Pero, según Caputo, el problema no es que los precios suban sin control, sino que "se adelantaron".
La gran estafa de Milei y Caputo
Para entender cómo funciona esta lógica distorsionada, basta con un simple ejemplo:
Diciembre 2023
Dólar Blue: $1.120
Nafta premium: $316 por litro
Con un dólar podías comprar más de 3,5 litros de nafta.
Febrero 2024
Dólar Blue: $1.215
Nafta premium: $1.422 por litro
Con un dólar, hoy apenas comprás 850 cm³ de nafta.
El poder adquisitivo se desploma, pero el relato oficial nos quiere convencer de que no es un problema del dólar, sino de los precios. Bajo esta lógica, la inflación no existe: simplemente, los precios corren demasiado rápido.
El golpe contra la pared está cada vez más cerca
Mientras tanto, el Banco Central sigue quemando reservas a un ritmo de 100 millones de dólares por día para evitar que el dólar financiero se dispare. Una estrategia insostenible que solo está retrasando lo inevitable: un salto cambiario que hará explotar aún más los precios y pulverizará lo poco que queda del poder de compra de los argentinos.
La llegada del FMI a Buenos Aires y su silencio tras ver los números del Gobierno es otra señal de alerta. Saben que la situación es insostenible y que, tarde o temprano, la devaluación será inevitable. Pero Caputo y Milei siguen jugando con fuego, vendiendo relatos mientras la economía se dirige a toda velocidad hacia el choque.
La pregunta no es si el golpe llegará, sino cuándo. Y mientras tanto, el pueblo sigue pagando la cuenta.