El Engaño de Milei: Prometió Mejoras para los Jubilados, Pero los Deja en el Abandono
Javier Milei traiciona a los jubilados argentinos. A pesar de sus promesas de campaña, donde aseguraba que los jubilados recibirían lo que realmente merecían, Milei ha vetado la Ley de Reforma Jubilatoria, dejando a miles de adultos mayores en el abandono. Mientras tanto, el presidente sigue proclamándose uno de los políticos más importantes del planeta, una declaración que contrasta con el evidente desprecio hacia quienes más necesitan apoyo.
POLITICA NACIONAL
Por Selene Vallejos
9/2/20242 min read
El veto de Javier Milei a la Ley de Reforma Jubilatoria es una afrenta directa y vergonzosa contra los jubilados argentinos, aquellos que han trabajado toda su vida con la esperanza de una vejez digna. Durante su campaña, Milei no escatimó en promesas hacia este sector vulnerable, asegurando que bajo su gobierno, los jubilados cobrarían lo que realmente merecían. Sin embargo, sus acciones recientes no solo contradicen esas promesas, sino que muestran un profundo desprecio por quienes más necesitan del apoyo estatal.
El Decreto 782/2024, firmado por Milei, rechaza una ley que buscaba ajustar los haberes jubilatorios en un contexto de inflación galopante que está devorando los ingresos de los adultos mayores. En lugar de ofrecer una solución, Milei opta por destruir cualquier posibilidad de mejora para este grupo, alegando preocupaciones fiscales que, según sus propias cifras, son una exageración grotesca.
¿Qué pasó con el Milei que prometía respeto y justicia para los jubilados? ¿Dónde quedó ese supuesto compromiso con quienes dieron su vida por el país? En lugar de cumplir con su palabra, Milei ha preferido lanzar un bono extraordinario que no es más que un parche temporal y miserable frente a la realidad económica devastadora que enfrentan los jubilados día a día. Este bono es, en el mejor de los casos, un gesto mínimo y, en el peor, una burla descarada.
Y mientras Milei juega con el futuro de nuestros jubilados, se permite delirios de grandeza, autoproclamándose "uno de los dos políticos más relevantes del planeta". Esta afirmación, hecha en una entrevista con Luis Majul, no es solo ridícula, sino profundamente preocupante. ¿Cómo puede alguien que se dice ser un líder preocuparse tanto por su propio ego mientras destruye el tejido social de un país que necesita desesperadamente soluciones reales?
La realidad es que mientras Milei se distrae con sus fantasías de poder, los jubilados argentinos están siendo destratados y abandonados. El veto a la Ley de Reforma Jubilatoria no es solo un error político; es una traición a las promesas hechas y una falta de respeto inexcusable hacia aquellos que más necesitan del apoyo estatal.
Es momento de que los argentinos exijan respuestas y acciones concretas. No podemos permitir que el delirio de un hombre siga poniendo en riesgo el bienestar de miles de jubilados. Milei debe dejar de lado su ego y recordar que su rol es servir al pueblo, no servirse a sí mismo. Los jubilados merecen algo mejor que promesas vacías y desprecio. Merecen dignidad, respeto y una vida sin preocupaciones financieras. Cualquier cosa menos que eso es una traición imperdonable.