El genocidio económico de Milei: 53% de pobres y 18% de indigentes en un país al borde del colapso
La Argentina enfrenta una de sus peores crisis económicas bajo el gobierno de Javier Milei. Con el 53% de la población en la pobreza y un 18% en la indigencia, millones de personas luchan por sobrevivir. Mientras tanto, el presidente parece ajeno a esta realidad, centrándose en frivolidades. ¿Cómo llegamos a este punto y qué nos espera si la situación sigue así?
POLITICA NACIONAL
Por Camila Dominguez
9/26/20242 min read
El reciente informe del INDEC ha revelado una realidad devastadora: el 52,9% de la población argentina vive en la pobreza, mientras que un 18,1% sufre de indigencia. Esto significa que más de la mitad del país está sumido en la miseria, y de esos, casi dos tercios son niños menores de 14 años. Estamos hablando de 25 millones de personas que no llegan a fin de mes, que no pueden cubrir las necesidades básicas. Esta es la verdadera cara de la Argentina de hoy.
¿Y qué hace el presidente Javier Milei ante esta situación? Invita a Susana Giménez a la Casa Rosada para una entrevista, en un gesto que parece una burla descarada a todos los argentinos que día a día luchan por sobrevivir. Mientras el país se hunde en la miseria, Milei se pasea con estrellas de la televisión, completamente desconectado de la realidad que vive su propio pueblo.
Es un acto de insensibilidad total. Mientras los informes oficiales nos muestran un país en crisis, donde la pobreza infantil alcanza el 66,1%, Milei prefiere rodearse de frivolidad y espectáculo. ¿Cómo es posible que, en lugar de tomar medidas urgentes para revertir esta situación, esté más preocupado por lucir en una entrevista con Susana? Parece que para Milei, el hambre y la pobreza de millones no son prioridad, sino un detalle incómodo que puede ignorar desde su Palacio de Versalles.
La frivolidad de este gobierno no tiene precedentes. En lugar de ponerse al frente de la lucha contra la pobreza, se refugian en shows mediáticos y se muestran incapaces de entender el sufrimiento de los argentinos. Este no es solo un problema económico, es un problema de dignidad humana. La falta de empatía de Milei y su gobierno es alarmante.
Es momento de exigir responsabilidad. No podemos permitir que sigan destruyendo el país mientras se ríen en la Casa Rosada. Milei vino a hacer un genocidio económico, y si no le ponemos un límite, la situación solo empeorará. Es hora de que el presidente deje de vivir en su burbuja y comience a gobernar para todos, no solo para las cámaras de televisión.