Enrico denuncia el abandono de las rutas nacionales: “El gobierno de Milei es una porteñocracia”
El desinterés del gobierno nacional liderado por Javier Milei hacia el interior del país se hace cada vez más evidente, especialmente en cuestiones críticas como el mantenimiento de las rutas nacionales
POLITICA INTERIOR
Julian Pereyra
12/16/20243 min read
En Santa Fe, la situación ha llegado a un punto insostenible, según denunció el ministro de Obras Públicas provincial, Lisandro Enrico, quien calificó a la gestión de Milei como una "porteñocracia" que concentra sus recursos y atención exclusivamente en la Ciudad de Buenos Aires y sus alrededores.
El abandono de las rutas nacionales
Con 2.700 kilómetros de rutas nacionales atravesando Santa Fe, el deterioro es palpable y peligroso. Enrico señaló que desde Nación no se realizan ni las tareas básicas de mantenimiento: “No cortan el pasto, no tapan los pozos, no tienen proyectos, cambian las cosas todo el tiempo, y políticamente nadie pone la cara”. Estas palabras exponen una realidad que no solo afecta la seguridad vial, sino también la economía y la conectividad de las regiones.
Mientras tanto, los impuestos nacionales como el IVA y las retenciones continúan llenando las arcas de un gobierno que prioriza la inversión en el área metropolitana de Buenos Aires, dejando al interior en un abandono alarmante. "Si los accidentes fatales que tenemos en las rutas santafesinas ocurrieran en el Obelisco o en la General Paz, ahí sí habría dinero para resolverlos", denunció Enrico, quien también destacó la indiferencia total de los funcionarios nacionales, describiendo la situación como una falta de humanidad.
Una provincia que asume responsabilidades ajenas
Ante la inacción del gobierno nacional, la provincia de Santa Fe se ha visto obligada a tomar medidas para garantizar un mínimo mantenimiento en las rutas. “Les hemos dado asfalto para que repare sus propios pozos en rutas como la 11, la 34 y la 168, pero ni siquiera así responden”, declaró el ministro. Además, la provincia ha iniciado un ambicioso plan de licitaciones para el mantenimiento de las banquinas de casi 10.000 kilómetros de rutas provinciales, dividiendo el territorio en 25 zonas para garantizar que los trabajos se ejecuten de manera eficiente.
Sin embargo, esta no es una solución sostenible. El gobernador Maximiliano Pullaro ha evaluado llevar el caso a la Corte Suprema de Justicia, exigiendo que el gobierno nacional asuma sus responsabilidades o transfiera la administración de las rutas a la provincia, un pedido que refleja el nivel de frustración ante la desidia de Nación.
La mirada centralista y sus consecuencias
La calificación de "porteñocracia" que Enrico utilizó para describir al gobierno de Milei resume una realidad que no es nueva, pero que se ha profundizado en el último año. Las decisiones políticas están guiadas por una visión centralista que ignora las necesidades del interior del país, perpetuando desigualdades históricas. Este desinterés no solo afecta la infraestructura vial, sino también la educación, la salud y el desarrollo económico de las provincias.
El abandono de las rutas nacionales es un reflejo más de un modelo de gestión que concentra recursos en el área metropolitana de Buenos Aires mientras el resto del país sufre las consecuencias. Las provincias, que ya soportan una carga fiscal desproporcionada, se ven obligadas a asumir responsabilidades que no les corresponden, desdibujando el concepto mismo de federalismo.
Un llamado a la acción
La situación de las rutas nacionales en Santa Fe es un ejemplo de cómo el desinterés del gobierno de Javier Milei hacia el interior impacta de manera directa en la vida de millones de argentinos. Es urgente que Nación rectifique su rumbo, no solo para garantizar la seguridad vial, sino también para construir un país más justo y equitativo. El interior no puede seguir siendo el patio trasero de un modelo centralista que prioriza el brillo de la Capital Federal por sobre las necesidades básicas del resto del territorio.