La búsqueda desesperada de Milei por la atención de Trump: llamadas, mensajes, y ahora un viaje a EE.UU. para que lo reciba

Tras múltiples intentos fallidos de contacto, el presidente argentino decidió volar a Estados Unidos para buscar el tan ansiado reconocimiento del mandatatario norteamericano. Después de llamadas sin respuesta, mensajes por X ignorados, y hasta un video en TikTok en el que se le ve visiblemente emocionado, Milei parece estar dispuesto a cualquier cosa para recibir la aprobación de Trump, al punto de convertir el vínculo en una especie de obsesión.

POLITICA NACIONAL

Por Julian Pereyra

11/7/20241 min read

En un episodio que bordea el absurdo, Javier Milei, presidente de Argentina, parece estar dispuesto a todo para captar la atención del recién electo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Desde mensajes en redes sociales hasta un video en TikTok con subtítulos en inglés, Milei ha desplegado un abanico de gestos para conseguir una respuesta del líder republicano. Sin embargo, el silencio de Trump ha dejado a Milei en una posición que no solo resulta llamativa, sino casi humillante para un jefe de Estado.

Tras felicitar a Trump en diversas plataformas y enviarle varios mensajes de apoyo a través de X (ex-Twitter), Instagram, y TikTok, Milei no obtuvo ni un “me gusta” en respuesta. Ante esta situación, el presidente argentino tomó una decisión aún más extrema: volar directamente a Estados Unidos en un intento de establecer contacto directo con el líder norteamericano. En su video de TikTok, Milei incluso repitió la consigna “Viva la libertad, carajo” y expresó que su “esperanza es que Trump nos ayude a hacer grande a Argentina”. Su determinación parece no encontrar límites, mientras la indiferencia de Trump continúa, dejando a Milei en una situación que muchos consideran, cuando menos, vergonzosa para un mandatario de una nación soberana.

Este episodio plantea interrogantes sobre la política exterior del gobierno argentino y la imagen que está proyectando a nivel internacional. A pesar de su popularidad en redes, el intento de Milei de forjar una conexión personal con Trump sigue sin éxito, mientras que en Argentina, los problemas internos crecen y las demandas de la ciudadanía quedan en segundo plano.