La crisis de SanCor: Un reflejo de la ineptitud del gobierno de Javier Milei

La caída en la producción, que ha llevado a la empresa a enfrentarse a una deuda multimillonaria que supera los 400 millones de dólares, se debe en gran parte a la falta de políticas públicas que respalden a las industrias nacionales. Con 500 despidos ya confirmados, la situación empeora día a día, y lo que parecía un proceso de reestructuración razonable se ha convertido en un abandono absoluto del gobierno hacia el sector productivo y sus trabajadores.

Además de la deuda con proveedores, SanCor enfrenta un dramático impago de 2.500 millones de pesos con la Empresa Provincial de Energía (EPE), lo que podría llevarla a perder el suministro eléctrico en las próximas semanas. ¿Dónde está el gobierno de Milei ante este colapso? ¿Por qué no se implementan medidas urgentes para evitar que una cooperativa que representa el esfuerzo de miles de trabajadores y pequeños productores sucumba ante la crisis?

Es inaceptable que, en un contexto tan grave, el presidente de la Nación se enfoque en discursos incendiarios y en atacar a sus opositores, mientras el aparato productivo nacional se desmorona. La falta de acción y de un plan claro para salvar empresas como SanCor es una muestra más de la desconexión del gobierno con la realidad que viven los argentinos en sus trabajos, en sus fábricas y en sus campos.

La respuesta de SanCor ha sido dramática: evaluar la salida de su estructura cooperativa y permitir la entrada de inversores privados que tomen el control de la empresa. ¿Qué significa esto para los trabajadores y productores? ¿Y para la soberanía alimentaria del país? Este es un paso peligroso, que refleja el fracaso del modelo neoliberal implementado por Milei y su equipo.

A su vez, la relación con los productores de leche también está al borde del colapso, ya que muchos de ellos han dejado de abastecer a la empresa debido a la falta de pago. El sindicato de trabajadores, ATILRA, ha anunciado acciones legales por las deudas salariales. ¿Cómo es posible que un gobierno que se autodenomina defensor del trabajo y la producción permita que la principal industria láctea del país llegue a esta situación de quiebra y desolación?

Es hora de que el gobierno de Javier Milei se haga responsable de la crisis que atraviesa SanCor. La falta de políticas públicas para la industria nacional y el desinterés por los sectores estratégicos son los verdaderos culpables de esta situación. Es fundamental que la Nación intervenga de manera inmediata, protegiendo a los trabajadores y pequeños productores, para evitar que la crisis de SanCor se convierta en una tragedia social aún mayor.

El gobierno de Milei ha abandonado a quienes generan el trabajo, producen los alimentos y sostienen el país. Desde el movimiento peronista, instamos a la acción urgente para salvar a SanCor y a tantas otras empresas que hoy se encuentran al borde del colapso. No podemos permitir que la especulación financiera y la desidia gubernamental destruyan nuestro aparato productivo y nuestras fuentes de trabajo.