La Mitomanía de Milei: Mentiras sobre jubilaciones, China y un ajuste que no da tregua

En su reciente entrevista con Susana, Javier Milei no solo reafirmó sus habituales mentiras, sino que sorprendió con nuevas contradicciones. Afirmó que las jubilaciones en dólares se triplicaron y expresó su admiración por China, país al que antes calificaba de "comunista". Mientras tanto, los argentinos se preparan para nuevos aumentos en la luz y el gas, en un contexto económico cada vez más asfixiante. ¿Hasta cuándo seguirá la fantasía del ajuste?

POLITICA NACIONAL

Por Camila Dominguez

9/30/20242 min read

El presidente Javier Milei vuelve a quedar en el ojo de la tormenta tras su reciente aparición en el programa de Susana Giménez, donde, en medio de bromas y comentarios triviales, lanzó afirmaciones que han generado indignación. Entre ellas, mencionó que "la jubilación en dólares se triplicó", una declaración completamente disociada de la realidad económica que atraviesan los jubilados y trabajadores argentinos.

A lo largo de su campaña, Milei se mostró como el defensor acérrimo de la libertad económica y el enemigo de cualquier relación con lo que él denominaba “gobiernos comunistas”. Sin embargo, durante su charla con Susana, reveló que en enero de 2025 tiene planeado un viaje a China, buscando “fortalecer relaciones bilaterales y aprovechar las oportunidades de inversión”. Este giro en su discurso refleja una de las tantas contradicciones que han caracterizado su mandato. Lo que hasta hace poco era una postura intransigente, ahora parece una estrategia de supervivencia económica.

Las mentiras sobre las jubilaciones

Pero lo que más ha molestado no son solo sus contradicciones diplomáticas, sino la falta de sensibilidad y verdad en sus palabras sobre la situación de los jubilados. Milei afirmó que “la jubilación en dólares se triplicó”, una frase tan absurda como ofensiva. Mientras los adultos mayores enfrentan dificultades para cubrir sus necesidades básicas, el presidente parece vivir en una realidad paralela.

El poder adquisitivo de los jubilados no solo no ha mejorado, sino que ha empeorado gravemente desde que asumió. La inflación, que continúa imparable, ha erosionado los ingresos de los sectores más vulnerables. Mientras el Gobierno promociona una supuesta “mejora” en la economía, las cifras de pobreza e indigencia siguen creciendo a un ritmo alarmante.

Aumento de tarifas: Golpe directo al bolsillo

Por si fuera poco, mientras Milei hablaba distendidamente en televisión, la realidad golpea fuerte en los hogares argentinos. Mañana mismo se espera un nuevo aumento en las tarifas de luz y gas. La excusa oficial es el “sinceramiento” de los precios, una palabra que suena más a burla cuando los ingresos de los argentinos no se sinceran de la misma manera.

La luz, el gas, el transporte y los combustibles continúan encareciéndose, dejando a una gran parte de la población en una situación desesperante. A pesar de las promesas de campaña de bajar los impuestos y mejorar el poder adquisitivo, el panorama es desolador: más gente sin trabajo, más familias sin poder pagar sus facturas y un Gobierno que sigue apostando a medidas de ajuste.

Un presidente que ataca en lugar de solucionar

Lo más preocupante de todo es que, lejos de asumir responsabilidades, Milei sigue culpando a otros por los problemas del país. Sus ministros, como Sturzenegger, no hacen más que anunciar más “motosierra”, con proyecciones de una caída del empleo del 12%, en un contexto donde la economía ya está al borde del abismo.

Mientras tanto, el Gobierno parece más interesado en mostrar una imagen de éxito internacional, cuando la prensa extranjera, como el Financial Times, ya los está criticando duramente. Los libertarios podrán vanagloriarse de que los mencionan en el exterior, pero la realidad es que los están destrozando.

Conclusión

La realidad que vive Argentina dista mucho de las palabras vacías que Milei promulga en televisión. Entre mentiras sobre la jubilación, su incoherencia respecto a China y el continuo ajuste que golpea a los sectores más vulnerables, queda claro que el presidente está más enfocado en mantener un show mediático que en resolver los problemas reales del país.