Llaryora pide reducir retenciones y cuestiona las políticas del gobierno nacional

El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, se erige como una voz clave en defensa del sector agropecuario frente a las políticas de ajuste impulsadas por el gobierno de Javier Milei. En un contexto de creciente tensión entre las provincias y la Nación, Llaryora vuelve a exigir una reducción de las retenciones a las exportaciones, resaltando el impacto negativo que estas medidas tienen sobre el interior productivo.

POLITICA INTERIOR

Federica Perez

1/8/20252 min read

A través de su cuenta en la red social X, el mandatario cordobés expresó su respaldo a las entidades agropecuarias que demandan acciones concretas para enfrentar la situación actual. “El campo necesita con urgencia una reducción de las retenciones a las exportaciones, permitiendo que esos recursos vuelvan a este pujante sector productivo. Nuestros productores han sido pilares del crecimiento del país durante décadas”, destacó.

El interior como motor de la economía nacional

En sus declaraciones, Llaryora subrayó que, desde la implementación de las retenciones, Córdoba ha sido una de las provincias que más ha contribuido al sostenimiento de las finanzas nacionales. Sin embargo, lamentó que esos recursos no se traduzcan en inversiones que fortalezcan las economías locales. “¿Se imaginan lo que sería nuestra provincia si ese dinero quedara en manos de quienes invierten, generan empleo y desarrollan nuestras comunidades?”, planteó.

El gobernador también señaló que la baja de los precios internacionales agrava la situación del sector, que se encuentra asfixiado por una carga impositiva excesiva y una falta de políticas de fomento. “Hay que sacarle la pata de encima al campo y liberar toda su capacidad productiva a favor de la Argentina”, concluyó.

Críticas al gobierno de Javier Milei

Las palabras de Llaryora también evidencian un fuerte contraste con las políticas del gobierno nacional. La gestión de Milei, caracterizada por recortes y ajustes centrados en un modelo de porteñocracia, ha generado un creciente malestar en el interior del país. Para el gobernador cordobés, estas decisiones no solo perjudican al campo, sino que también ponen en riesgo el equilibrio económico y social de las provincias productivas.

El peronismo históricamente ha entendido el valor del campo como motor de desarrollo y generador de riqueza, pero también como un sector que necesita apoyo y condiciones para seguir creciendo. Las retenciones, que en otros momentos fueron una herramienta de redistribución, hoy aparecen como un obstáculo frente a una economía en crisis. Llaryora, fiel a esta tradición, plantea un camino alternativo que priorice la producción, el empleo y el arraigo.

La responsabilidad de la Nación

La postura de Llaryora deja en claro que el gobierno nacional debe asumir su responsabilidad frente al interior. Mientras Córdoba, con recursos propios, intenta sostener sus economías locales, la falta de respuesta de la Nación pone en evidencia un modelo que beneficia a unos pocos en detrimento de las mayorías. Es tiempo de que el gobierno de Milei deje de mirar hacia otro lado y entienda que sin el interior no hay futuro para la Argentina.

El peronismo cordobés, con Llaryora a la cabeza, sigue apostando por un modelo federal, solidario y productivo, donde las retenciones dejen de ser un castigo para transformarse en una oportunidad para el desarrollo integral del país.