"¡Me prometieron 25 mil y me dieron dos mangos! El escándalo libertario en el cierre de campaña de Adorni

El cierre de campaña de Adorni terminó siendo más cuentapropista que libertario: militantes que fueron por 25 lucas, cobraron 10 mil (con suerte), les retuvieron el DNI y encima los querían obligar a ponerse una remera sucia de La Libertad Avanza. El relato anticasta se desmorona cuando hay que pagar aplausos con plata del Estado. Nadie es libertario gratis, hermano. Una sátira de la épica libertaria financiada con la tuya.

POLITICA NACIONAL

Por Julián Pereyra

5/14/20253 min read

Por momentos parecía una escena de Los Simuladores escrita por Capusotto en ácido. El cierre de campaña de La Libertad Avanza, con Manuel Adorni en modo influencer desesperado y Milei haciendo de Milei, terminó en escándalo, gritos y gente reclamando lo único verdaderamente sagrado para el liberalismo vernáculo: la guita.

Según testigos que asistieron al evento, la convocatoria masiva no fue precisamente un acto de fervor libertario espontáneo, sino más bien una coreografía armada a billetazo limpio. “Prometieron 25 lucas por cabeza, más traslado. Pero al final nos quisieron pagar 10 mil y a algunos ni eso. Y encima nos retuvieron el DNI. Es una estafa piramidal pero con pelucas”, declaró un asistente, con más bronca que anarcocapitalismo.

Uno de los convocados denunció indignado: “¡Me quieren dar dos pesos y porque no me quise poner la remera sucia esa de La Libertad Avanza, no me quieren pagar!”. La famosa remera violeta de la épica libertaria, que parece que además de estar sucia, ahora viene con cláusula de esclavitud ideológica.

Esto, que podría sonar a sketch, es apenas una pincelada del caos que se vivió en el cierre de campaña. Militantes que esperaban cobrar se fueron con las manos vacías (y sin DNI), otros amenazaban con hablar “aunque los lleven en cana”, y la policía tuvo que intervenir para calmar los disturbios entre los que querían cobrar sus 25 mil y los organizadores que parecían más ocupados en contar billetes que votos.

¡Ah, el liberalismo criollo! Ese que se llena la boca hablando contra la casta, el gasto público, y el “Estado que no sirve para nada”, pero a la hora de llenar una plaza para hacer número en campaña, lo hace “financiado con la tuya”. Porque si no ponés plata, no te viene ni el tío del CM de Adorni. Nadie es libertario gratis, hermano.

La épica del voucher y el choripán sin coca sigue sumando capítulos tragicómicos. En este caso, con promesas de 25 lucas por militante que terminaron en un "te damos diez y gracias". Al final, los únicos que parecen vivir del Estado son los que dicen querer hacerlo volar por los aires.

Mientras Adorni daba entrevistas en modo estrella de TikTok, intentando convencer que era un acto “espontáneo, lleno de emoción y convicción”, en los grupos de WhatsApp explotaban los audios de pibes puteando porque los trajeron desde Provincia, les prometieron guita y encima los querían vestir con ropa de cotillón político.

“Yo vine a laburar de seguridad y no me quieren pagar porque no me puse la remera. ¿Qué sigue? ¿Tatuarme a Milei en la frente para cobrar?”, dijo otro de los damnificados, entre el enojo y el surrealismo.

Pero ojo, que nadie se sorprenda. Acá no hay épica popular, ni mística revolucionaria: hay planilla de Excel, transferencia y ticket. Si no, a Adorni le van tres gatos locos, uno disfrazado de león y otro que solo fue porque se confundió de evento.

Así es como el “cierre de campaña” terminó pareciendo más un reclamo sindical con banderas de Adam Smith. Gente gritando por lo que les deben, policías interviniendo, y un olor a “todo por dos pesos” que ni en los noventa.

¿El balance final? Adorni pagó para que lo aplaudan y terminó haciendo trending topic el verso más viejo de todos: "si querés convocar, abrí la billetera". Eso sí, después no se quejen cuando les digan que el liberalismo argentino es una estafa piramidal con estética de foro Reddit y alma de puntero barrial.

O quizás, simplemente, cobrar lo que te prometieron y no tener que ponerte la remera sucia.