Nueva persecución fiscal: ARCA exige justificación legal hasta para pagar el alquiler
El gobierno, a través de ARCA, implementó nuevas reglas que obligan a justificar legalmente transferencias mayores a $400.000, recordando las restricciones del corralito de 2001. Estas medidas, que afectan incluso pagos esenciales como el alquiler, generan preocupación por el control creciente y el impacto en la libertad económica de los ciudadanos.
POLITICA NACIONAL
Por Camila Dominguez
1/2/20252 min read
Arrancamos el 2025 con una preocupante “libertad”, esa que el gobierno de Javier Milei prometió y que ahora se traduce en controles cada vez más opresivos para los ciudadanos. La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), ese organismo que no es más que la vieja AFIP con otro nombre, anunció nuevas reglas que ponen bajo la lupa hasta los pagos más básicos. Ahora, cualquier transferencia superior a $400.000 hecha a través de billeteras digitales como Mercado Pago requerirá “justificación legal”. Como si fuera poco, también se exigirá justificación para transferencias bancarias mayores a $250.000 por Home Banking y $125.000 en operaciones presenciales.
La indignación no es para menos. Esta medida, presentada con el habitual disfraz de “transparencia fiscal”, afecta directamente a quienes tienen que realizar pagos esenciales como el alquiler. Es imposible no recordar cómo empezaron las restricciones en los tiempos de De la Rúa y Cavallo, medidas que sembraron el caos económico y culminaron en el famoso “corralito”. Ahora parece que la historia quiere repetirse, y mientras tanto, los ciudadanos seguimos cayendo en el mismo pozo.
La “libertad” que nos lleva al control total
Irónicamente, las promesas de libertad y menos regulaciones fiscales que formaban parte del discurso de Milei se desmoronan con cada nueva resolución de ARCA. Este nuevo esquema no solo complica la vida cotidiana, sino que también genera un clima de desconfianza total. Si necesitas transferir dinero para pagar el alquiler, ahora deberás justificarlo ante el organismo recaudador como si estuvieras cometiendo un delito. ¿Así es como se fomenta la libertad económica?
La situación es tan absurda como indignante. Las personas que viven de alquiler ya enfrentan precios desorbitantes y contratos dolarizados, y ahora también deben lidiar con la burocracia interminable de justificar una transferencia bancaria. Es como si el Estado estuviera buscando convertir cualquier acción económica en un motivo de persecución.
El fantasma del corralito vuelve a aparecer
Estas medidas despiertan recuerdos oscuros en la memoria colectiva. Durante la crisis del 2001, también comenzaron con restricciones “moderadas” que se justificaban como necesarias para “ordenar” las finanzas. Pero todos sabemos cómo terminó esa historia: miles de argentinos sin acceso a sus ahorros, un sistema bancario colapsado y una crisis social que dejó huellas imborrables.
El camino que está tomando ARCA no es distinto. Mientras la inflación sigue devorando los ingresos y los precios aumentan sin control, las personas deben enfrentarse a un aparato estatal que en lugar de ofrecer soluciones reales, se dedica a imponer más trabas y controles. Todo esto en nombre de una “transparencia” que parece estar destinada solo a complicar la vida de quienes menos tienen.
La exigencia de justificación legal para transferencias como el pago del alquiler no es más que una muestra de la desconexión total del gobierno con las necesidades de los ciudadanos. Las promesas de libertad económica y menos impuestos han quedado en el olvido, reemplazadas por medidas que recuerdan los peores momentos de nuestra historia reciente. Mientras tanto, los argentinos seguimos pagando el precio de un modelo económico que solo sabe perseguir y ajustar.
La pregunta es: ¿hasta cuándo seguiremos tolerando estas políticas que no hacen más que profundizar el malestar social? Porque si algo queda claro, es que de la “libertad” que nos prometieron no queda ni el nombre.